Todo estaria muy bonito si eso no se pareciera a la “ley del embudo”: lo ancho para los Castro y lo estrecho para USA. Obama ofrece todo, y ni siquiera pide la justa indemnizacion, por la propiedades norteamericanas expropiadas sin compensacion a partir de 1959, y que fu3e realmente el motivo del embargo. Canjea a espias cubanos, culpables del asesinato de ciudadanos norteamericanos derribados en 2 avionetas por la Fuerza Aerea castrista en aguas intrernacionales, por Alan Gross, secuestrado ilegalmente en Cuba al mejor estilo de las FARC por mas de 5 anos. La posicion de Obama no parece propia de un Estadista, y menos del Presidente de la primera potencia mundial: darlo todo sin recibir nada a cambio.
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